Anti- Defamation League. “The El Paso Attack, One Year Later: Extremist Threat Remains High”. ADL. (2020) https://bit.ly/2Qnag68
*Esta es una síntesis anotada realizada por CIPMEX sobre el texto arriba referido*
El artículo elaborado por la Liga Anti-Difamación (ADL) comienza relatando que el 3 de agosto de 2020, Patrick Crusius, un supremacista blanco de origen estadounidense fue el responsable del shooting que se llevó a cabo en un Walmart en El Paso, Texas, en donde murieron 23 personas y otras 23 resultaron heridas. Debido al número de víctimas, el ataque se considera como uno de los ataques terroristas domésticos más grandes en la historia de Estados Unidos, además de ser uno de los peores ataques que se han visto a la comunidad latina en la historia moderna del país. (ADL, 2020, 1)
Desde el ataque de Crusius no se han visto ataques como este por parte los extremistas de ultraderecha, pero la amenaza sigue presente. El autor subraya que, aunque no han ocurrido más incidentes, eso no significa que los grupos extremistas no han intentado llevar a cabo más ataques, lo que pasa es que los intentos no han sido exitosos, por ejemplo, un shooting que ocurrió en un centro comercial en mayo de este año, pero no hubo ninguna muerte ni heridos. (ADL, 2020, 4) La ADL define un ataque exitoso como aquel en el cual individuos resultan heridos o muertos o, en los casos donde el objetivo son bienes materiales, cuando estos son dañados. (ADL, 2020, 6) A pesar de que en este año no se han visto incidentes exitosos como el shooting de El Paso, no se puede considerar como un ambiente de paz ya que e miedo sigue presente en la sociedad. En las investigaciones de CIPMEX se explica que la paz negativa se encuentra no solamente cuando hay ausencia de violencia, ya que también es necesaria la ausencia del miedo a la violencia. Aunque no se han visto ataques en Estados Unidos en estos doce meses, no se puede hablar de la existencia de paz.
El texto también menciona que los extremistas de ultraderecha sí han asesinado a personas en Estados Unidos después del ataque en El Paso, se han identificado 15 asesinatos provocados por estos grupos en estos meses, de los cuales 10 fueron llevados a cabo por supremacistas blancos. El artículo explica que estos ataques no se pueden meter en la misma categoría que el shooting de El Paso por dos razones; primero que las matanzas no ocurrieron como consecuencia de una ideología, y segundo, que no fueron resultado de un ataque en masa. (ADL, 2020, 5)
El Centro de Extremismo de la ADL ha rastreado por lo menos 18 incidentes terroristas, incluyendo ataques, intentos de ataque y complots, por parte de extremistas de ultraderecha blancos desde el ataque de El Paso. De estos incidentes, nueve fueron llevados a cabo por supremacistas blancos, cinco por extremistas anti-gobierno, y el resto por grupos antiaborto y grupos anti musulmanes. (ADL, 2020, 7) Si hubieran sido exitosos, estos incidentes pudieron haber tenidos consecuencias muy grandes, tales como la explosión de un hospital en Kansas con pacientes con Covid-19 en marzo. Los incidentes fueron frenados por las autoridades antes de que fueran llevados a cabo. (ADL, 2020, 8) El artículo explica que una de las principales razones por las cuales los incidentes no han sido exitosos es que se ha visto un aumento importante en la seguridad y la vigilancia por parte de las autoridades para casos de terrorismo y el extremismo de ultraderecha, enfocándose más que nada en las nuevas generaciones. (ADL, 2020, 9) El aumento en la seguridad que se ha visto en Estados Unidos en los últimos años ha tenido resultados positivos al momento de evitar ataques terroristas y extremistas, pero la amenaza sigue presente y hay un miedo constante en la población. Mayor seguridad no ha evitado los intentos de ataque, solamente ha evitado que sean ataques exitosos. Es necesario combatir esto a través de estrategias estructurales.
El artículo explica que actualmente, los ataques de los supremacistas blancos tienen como principal objetivo a la comunidad hispana, y aunque no se han visto ataques en masa recientemente, las amenazas a esta población a través de propaganda en internet y redes sociales ha aumentado en el último año. (ADL, 2020, 11) Se vieron 2,600 casos de propaganda de este carácter registrados en la primera mitad del 2020. (ADL, 2020, 12) Esto se puede ver claramente con el ejemplo del New Jersey European Heritage Association (NJEHA), la cual ha incrementado su propaganda después del shooting de El Paso, y su propaganda incluye mensajes como, “Mass immigration is white genocide,” y “Build the wall! Deport them all!”, al igual que otros que se han acoplado al contexto de la pandemia actual, tales como “Open borders spread disease,” y “Closed borders: the best vaccine,” (ADL, 2020, 13) Asimismo, individuos asociados con el American Identity Movement (AIM) crearon propaganda con la frase “Immigration kills.” (ADL, 2020, 14) A lo largo de la historia se ha visto que la propaganda tiene un papel fundamental para grupos extremistas, ya que es una forma efectiva para la difusión de ideas y discursos. Hoy en día, como consecuencia de la globalización, los medios de comunicación, y el acceso a la información, la propaganda ha aumentado y su distribución se ha vuelto mucho más sencilla. Sería importante hacer la pregunta, ¿hasta qué punto la libertad de expresión debe tener un límite cuando esta incita al odio?
El artículo es relevante para las investigaciones de CIPMEX ya que los ataques por parte de extremistas de ultraderecha es un elemento sumamente grande que impide la posibilidad de construcción de paz positiva, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo, porque a pesar de que no se han visto ataques en los últimos doce meses (sin contar los casos aislados que se mencionan anteriormente), es imposible la construcción de paz en un contexto donde existe un miedo constante en la población. Además es importante analizar el resurgimiento de estos pensamientos xenófobos y racistas, al igual que de los movimientos de ultraderecha.