Por Andrea Muhech. Publicado en Cultura Colectiva el 1 de junio del 2020. Enlace original: https://bit.ly/3gImDWj
Hace unas semanas fue Ahmaud Arbery y hoy es George Floyd. Ahmaud a manos de un ex agente de policía y George a manos de un policía. Ambas víctimas hombres de raza negra y ninguno portaba armas. Ambas agresiones grabadas por un tercero. Después de tres meses y decenas de protestas de todo tipo, el asesino de Ahmaud fue detenido, el de George, inicialmente sólo perdió su trabajo.
¿Qué sucedió?
Hace exactamente una semana, un policía (blanco) en Minneapolis detuvo a George y puso su rodilla en el cuello de la víctima, esta, se encontraba en el suelo sangrando y perdiendo poco a poco la capacidad de respirar mientras los minutos pasaban. Tanto George como la gente que se encontraba alrededor exigieron que la agresión se detuviera, sin embargo, eso no sucedió y el hombre murió.
El asesino de George y los otros tres policías que lo acompañaban fueron despedidos. No obstante, cientos de personas inundaron las calles de Minneapolis y otras ciudades como Nueva York, Denver o Columbus la semana pasada para exigir que estas personas sean detenidas y sentenciadas. “Su violencia ha traído esta resistencia» (Whitney Gottbrath 2020).
¿Cómo reaccionó Donald Trump? Poniendo un tweet en el que se refiere a las protestas que dice lo siguiente “Acabo de hablar con el gobernador Tim Walz y le dije que el ejército lo acompaña todo el tiempo. Asumiremos el control sobre cualquier dificultad pero, cuando comience el saqueo, comenzará el tiroteo. Gracias.”
Ahora bien, en este texto sólo se mencionan dos nombres. Dos víctimas que llegaron a los medios de comunicación de todo el mundo gracias a videos y al activismo en el terreno y en las redes sociales. Dos víctimas que nos llevan a resaltar los siguientes puntos: 1) Esos hombres murieron en minutos, pero esos minutos representan cientos de años de violencia directa y estructural con motivos raciales y las protestas están cargadas con todo eso. No todos los actos violentos son visibles o tienen que ver con agresión física y de acuerdo con Galtung, podemos pensar en esas dinámicas como un iceberg en donde lo visible es nada más la punta.
2) Los asesinatos representan la acumulación de ideologías adquiridas y respaldadas con discursos, grupos de individuos, información disponible e incluso organizaciones. No te despiertas un día y decides agredir en plena luz del día y enfrente de decenas de personas a otro que de casualidad pertenece a una comunidad históricamente en desventaja. 3) Recordemos que estamos hablando de agresores que son policías o expolicías. Eso sirve para; a) reafirmar que la cuestión es estructural, y b) pensar en todo lo que ocurre a diario y que no se graba al no llamar tanto la atención. 4) Lo sucedido se podría catalogar como crimen de odio. Aquí la definición (ADL 2020): “actos criminales en contra de una persona o propiedad en la que el autor elige a la víctima debido a su raza, religión, origen nacional, origen étnico, orientación sexual, discapacidad o género real o percibido”. Ya veremos cómo se desenvuelve el caso.
El racismo no está empeorando ni se está haciendo mayor, lo que está sucediendo, es que se está exponiendo en los medios de comunicación y la sociedad no se está quedando callada. Las víctimas cuyos nombres llegan a nuestros oídos o llegamos a leer son sólo una representación y personificación de todos aquellos que han muerto y cuyas vidas se ven afectadas a diario por la historia que venimos cargando. Todos tienen nombre, aunque sólo conozcamos un par. Y sí, digo venimos porque en estos casos estamos hablando de Estados Unidos, pero este no es un tema de territorio este es un tema humano presente alrededor del globo.
¿Y qué puedes hacer tú? Además de revisar el contenido que consumes (porque lentamente en eso te conviertes y hoy en día hay demasiada información), cuestionar tus ideas para verificar que en efecto sean tuyas y no algo que te sembraron terceros, publicar en las plataformas de una manera informada y, si lo deseas, utilizar esas y otras herramientas para unirte al movimiento y alzar la voz en caso de ver cualquier injusticia. La sociedad civil importa y tiene mucho poder, organizada, esta puede generar cambios visibles e invisibles.