¿Por qué los esfuerzos para construir puentes podrían amenazar la paz en los Balcanes?

Stratfor. 2018. “Why Efforts to Build Bridges Could Threaten Peace in the Western Balkans”. Stratfor, 4 de septiembre de 2018. https://worldview.stratfor.com/article/why-efforts-build-bridges-could-threaten-peace-western-balkans

*Esta es una síntesis anotada realizada por CIPMEX sobre el texto arriba referido*

Como mera introducción de la Evaluación de Stratfor señala que, en los últimos meses de 2018, la paz en los Balcanes Occidentales se pondrá a prueba, ya que una propuesta entre Serbia y Kosovo para intercambiar territorio podría generar malestar social en ambos países, ya que los grupos que se oponen al movimiento podrían resistir su implementación y por ende, provocar un efecto desestabilizador en la región (Stratfor 2018, pa. 2). Mientas que Macedonia hará un referéndum para cambiar su nombre con el objetivo de ponerle fin a la disputa que tiene con Grecia, esto podría causar otro desequilibrio en la región porque podría despertar sentimientos nacionalistas, así como enfrentamiento con la oposición política de ambos países (Stratfor 2018, pa. 2)

Sobre las conversaciones Serbia-Kosovo, se ha hablado de un acuerdo bilateral que podría incluir un posible “ajuste fronterizo”, en el cual algún territorio de Serbia sería cedido a Kosovo y viceversa –pero aún no han dicho cuáles serían- con la finalidad de que ambos territorios sean más étnicamente homogéneos  (Stratfor 2018, pa. 3-4). Serbia ha cedido con Kosovo, porque es un requisito para su adhesión a la Unión Europea. Sin embargo, los partidos de oposición y los políticos de ambas partes han condenado la propuesta, porque temen que resurjan los nacionalismos étnicos (Stratfor 2018, pa. 4). Esto te habla de una falta de cohesión social, porque no existe coherencia en el sentimiento de pertenencia de ambas naciones, reflejado en los territorios. Asimismo, existe el miedo de que resurjan los nacionalismos étnicos, esto señala una falta de respeto a los derechos del otro, de su cultura, de su etnia, etc. Ambos temas son parte de la agenda de CIPMEX, porque afectan la construcción de paz.

Asimismo, los opositores se preocupan de que dicho intercambio territorial pueda inspirar al rediseño de otras fronteras de la región (Stratfor 2018, pa 5). Stratfor menciona dos ejemplos: Bosnia-Herzegovina y Macedonia. El primero podría amen2azar su unidad territorial, porque los serbios étnicos en el país podrían demandar independencia o intentar anexarse a Serbia. El segundo, también podrían exigir la autodeterminación o la posibilidad de unirse a Albania. Poniendo a ambos países en un colapso territorial. Por lo que, este plan de homogeneidad étnica estaría llevando al fracaso el tener países multiétnicos en los Balcanes (Stratfor 2018, pa. 5). Nuevamente, es un ejemplo de falta de cohesión social, uno de los pilares de la paz. Asimismo, un país multiétnico necesita el respeto entre todos y buen funcionamiento del gobierno, que haga valer los derechos por igual; temas que también investiga CIPMEX.

La respuesta Internacional (Stratfor 2018, pa. 6-7) hacia este acuerdo territorial ha sido unas a favor y otras en contra. La Unión Europea – comisionado Hahn- aceptó el acuerdo entre Serbia y Kosovo, pero advirtiendo que no podía ser tomado como modelo para replicarlo en otros Estados. Sin embargo, Merkel lo rechazó señalando que la integridad territorial de los Balcanes es inviolable. Por su parte, Bolton (EUA), aceptó dicho acuerdo siempre y cuando Rusia no tomara partido por Serbia, ya que son aliados. Asimismo, Vucic, diplomático serbio, se reunirá con Putin y Trump porque son actores esenciales de las negociaciones, especialmente porque el intercambio territorial podría estar sujeto al voto del Consejo de Seguridad de la ONU.

Por otro lado, se encuentra el referéndum que realizará Macedonia el 30 de septiembre para cambiarse el nombre de la República de Macedonia, que Grecia reclama como parte de su patrimonio cultural, a la República del Norte de Macedonia (Stratfor 2018, pa. 9). Atenas usó durante años el nombre como un pretexto para vetar el acceso de Macedonia a la OTAN y a la Unión Europea, organismos a los cuales Macedonia quiere pertenecer (Stratfor 2018, pa. 9). Los grupos de oposición podrían boicotear un referéndum, creando espacio para la violencia motivada políticamente y étnicamente, que puede sacudir la estabilidad nacional (Stratfor 2018, pa. 10). El problema, también, podría causar disturbios sociales y turbulencias políticas en Grecia (Stratfor 2018, pa. 13).

En conclusión, la perspectiva de adhesión a la Unión Europea explica, al menos en parte, la voluntad de Serbia de comprometerse con Kosovo. Mientras tanto, Macedonia considera que la resolución de la disputa por el nombre con Grecia allana el camino para que se una a la OTAN y al bloque europeo. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de esos vecinos para llegar a un entendimiento mutuo, muchas partes de la región siguen siendo propensas a los disturbios sociales y la violencia étnicamente motivada (Stratfor 2018, pa. 15). Asimismo, tendría que ser investigadas las causas de fondo que perpetúan estas diferencias étnicas en la sociedad, ¿son los políticos, los medios de comunicación, la falta de instituciones, o qué es? ¿Por qué su manera dar a conocer su inconformidad es a través de disturbios sociales y violencia; y no a través de sus instituciones? Este tipo de investigaciones son las que hace CIPMEX para saber el trasfondo de lo que impide la construcción de paz en un país.

*Si desea leer el texto original del autor referido, puede consultar este enlace:  https://worldview.stratfor.com/article/why-efforts-build-bridges-could-threaten-peace-western-balkans

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